martes, 6 de julio de 2010

El mundial de los románticos

Una vez conocí un argentino que me explico la receta para crear un uruguayo, me dijo:
-Gabo, tenés que agarrar un poquito de barro, ego y mierda (caca).
-¿caca?
- esperá (creo que así hablan los Rioplatenses), agarrás una olla bien grande, ponés un poquito de ego, metés todo el barro y vas moviendo de a pocos. Echas un poco de mierda y seguís moviendo, echas otro poco de mierda y seguís moviendo, echas otro poco de mierda y seguís moviendo; pero cuidado que se te pase la mierda por que te sale un argentino.
Exploté de la risa y me di cuenta del reconocimiento que los latinos sudacas tenemos por el pueblo uruguayo, que es un país pequeño, con un poco más de tres millones de habitantes y sobresaliente por su cultura.

Éste país apareció en la geografía mundial en el año 1924 cuando ganó, a punta de patadas, las Olimpiadas de Colombes en Francia y reingresa después de muchas décadas a ser foco de críticas y elogios con un planteamiento impecable de Oscar Tabarez, el talento de Diego Forlán, el valor de Luis Suarez y unos jugadores que anatómicamente cuentan con un testículo más que el promedio.
Uruguay llegó a la semifinal de Sudáfrica 10 en representación del último mundo, tapándoles la boca a los periodistas deportivos, opacando la zamba brasileña, la imprudencia argentina y sobre todo luchando contra nosotros mismo, contra la envidia y la poca estirpe para la gloria que tiene el pueblo Sudamericano. También es verdad que no pudo más, perdió contra Holanda el pase a la final sin ser menos equipo en la cancha; murió, como estamos acostumbrados a decir, “parado”, luchando minuto a minuto su clasificación a la gloria. Esta vez la suerte, la titiritera, se vistió de naranja.

La lamentable derrota de Uruguay marca el fin del mundial para los románticos y soñadores, para los rebeldes y corajudos, y para todos los que gritamos hasta el infinito el golazo de Luchito Suarez y el penal fallado del africano Gyan. Los charrúas han demostrado con tesón y alegría que “por más que los tecnócratas lo programen hasta el último detalle, que las poderosas trasnacionales lo manipulen y exploten, el fútbol continúa queriendo ser el arte de lo imprevisto, de lo impensado, conservando su porfiada capacidad de sorpresa. Porque a pesar de que quieren convertirlo en un espectáculo, un negocio vulgar y silvestre, sigue siendo fiesta de los ojos que lo miran y alegría del cuerpo que lo juega”, como escribiera el escritor y periodista uruguayo Eduardo Galeano.

Este mundial fue para soñar, para escuchar declaraciones de algunos técnicos geniales como Tabarez y pervertidos como mi ídolo Maradona, para desempeñar mal nuestras labores (por la hora en que se transmitían los partidos) y envidiar los ternos satinados de Versace; este mundial se terminó inclinado para Europa y sus tecnologías deportivas; este mundial nos hizo pensar en los errores del futbol peruano, pero de una manera más nostálgica. El mundial de los románticos se acabó con la cara de perdido que puso Lionel Messia ante el calculador juego alemán, con la ira interna de Rooney, con los ojitos andrógenos que se llenaban de lágrimas cuando Kaká se iba al vestuario, con el trasero de Cristiano que buscaba las cámaras y con todos los que participaron en el comercial de Nike: Write the future.

Si bien, este logro uruguayo no quedará en la historia, alimentará la ilusión en muchos corazones. Entre la historia y la ilusión… me quedo con la ilusión.

Aquí les dejo el mejor gol del mundial y el comercial de los que no pudieron.



14 comentarios:

  1. pese a la derrota, tabarez es un genio!

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  2. me encanto tu forma inteligente de ver el futbol mas alla de una jugadaa miles de sentimientoss , y de hecho uruguay demostrooo y sorprendio!

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  3. este es el tipo de articulos donde predomina la necesidad de escribir sobre elanimo de gustar y es esta caracteristica la que causa que sea agradable y que uno se sienta vinculado . Tienes una forma muy ordena e interesante de expresar y plasmar sentimientos .

    El negro.

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  4. Christian Fernandez-Prada Biasca7 de julio de 2010, 20:56

    Cuándo sentiremos la pasión por gritar un gol que sea nuestro, cuándo no nos contentaremos con ser peores que los mejores, cuándo seremos una nación, cuándo dejaremos de comer una butifarra de 9 monedas frente a la bolsa de la pobreza que clama por un centavo con infantes confundidos con la gris realidad, colgados cual trapos en el lomo de la tristeza y la resignación a ser algo que nunca se deseó ser, algún día dejaremos de ser el humus que verá nacer a la flor de Ribeyro para ser la flor misma, mientras tanto no tengo sino que combatir con la injusticia del injusto, pero cómo hacerlos sino tengo un sueldo justo, si aún no tengo pelos en el mentón, si mi voz no es escuchada entre el montón, esta iniciativa que haz tenido es una a la cual no me animé nunca quizás por el miedo a no ser lo que esperan que sea o por no ser lo que espero se, aplaudo que inicies las publicaciones y para otra en un renglón menciona al potón.

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  5. lo siento, hasta ahora no veo un solo partido completo.
    te odio denso

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  6. Arriba alianza carajo, el sabado somos

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  7. :S libertd de expresión... libertades :D

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  8. La mejor película dramática que vi fue el de Uruguay y Ghana, buen partido, solo logré verlo en la repetición, ya que me desperté tarde. Aún así fue demasiado aquél juego, veía la repetición como si no supiera ya los resultados, y presionaba los puños en cada posibilidad de un grito sudamericano. No me gusta el futbol, pero este tipo de eventos unen a la gente en cualquier circunstancia. Hablé más con mi padre sobre futbol que como hijo. No solemos hablarnos. Las mujeres incluso comentaban más de lo normal, y eran comentario no tan "cliché" como se espera en cada machista de esquina. Alemania fue el Macchiavello de este mundial. Yo sigo creyendo en mi país, a pesar de que cada sudamericano (menos chile) que jugaba sentía que nos representaban en el mundial, como una familia. No me gusta el futbol, pero sé que en algunos peruanos nos dan ganas de entrar a la cancha y meter goles a nombre de nuestra patria.

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  9. Carajo, escribes con ironía, manejas bien el castellano, tienes respeto por las formas y por la ilusión, recuerda que el idioma es complicado, pero suele ser hermoso cuando con naturales lo llevas lentamente al encuentro del eros y el thanatos, de la ilusión y la desdicha, de la probreza y la fatuidad de Asia.
    Escribir es un ejercicio cotidiano de bohemia, insomnio, la burla de uno mismo y el afecto por la más preciado que tenemos los humanos que son nuestros perros.
    Uruguay es la muestra que los sueños son la inexistente realidad de los desprotegidos de los más débiles, que sólo pueden compensar tantas falencias con testosterona por galones.

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  10. Disculpa el anterior comentario me pertenece.
    Beto Rossel

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  11. ...con naturales.

    Eso, depende del origen de ellos.

    Espera a que me encargue de eso, si es que me entiendes.

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  12. Chicos, a dormir, padre e hijo tienen que hablar.

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  13. jajajajaJAJAJ, fue mi papá, tiene un blog pero me escribe desde el mío por que, tanto él como yo, sufrimos de problemas mentales y mucha distracción.

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  14. Se nota, por que estás como "Anónimo".

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